Santo y su eterna lucha contra los vampiros

El Santo es quizás el más famoso de los luchadores en Latinoamérica, y ha sido referido como una leyenda de este deporte en México. Su carrera en la lucha libre duró casi cuatro décadas, durante las cuales se convirtió en un heroe popular y un símbolo de la justicia para el hombre común, ya que su personaje trascendió el ámbito de la lucha libre, transformándose en una especie de súper héroe al protagonizar comics y películas.
El estilo de las películas de El Santo fue esencialmente el mismo durante las casi 60 películas que protagonizó, con argumentos donde actuaba como súper héroe luchando contra criaturas sobrenaturales, mad doctors… Con un tono similar a las películas y series de televisión clase B de los EEUU, quizás muy similar a la serie de Batman de 1960. Para el público en general, la película más conocida es Santo vs Las Mujeres Vampiro (1962); en esta película la inversión en la producción fue más alta, y dio una pauta para introducir un origen y la creación de su mitología, estableciendo que él era el último en una línea de luchadores contra el mal. Aunque las tentativas de crear un estilo de terror gótico generalmente se consideraron menos que acertadas, y la película se considera más una comedia que un filme de horror en la actualidad, este fue un enorme éxito en taquilla, y se exportó a muchos países, siendo su secuela La Venganza de las Mujeres Vampiro (1970).



Tras el éxito de su primer enfrentamiento contra los vampiros, se rodó el filme Santo vs Barón Brákola (1963), siendo lo más destacado de la película es que por primera vez Santo es besado por una mujer en la gran pantalla, y la primera ocasión en que se incluyen escenas “nudies” para su exportación a EEUU. Santo y el Tesoro de Drácula (1968), es una de las primeras películas en color de Santo, pero algunas de las copias que circulan en vídeo están en blanco y negro; y es la primera ocasión, en que, después de luchar con seguidores, acólitos y secuaces, Santo se enfrenta al propio Drácula. Cabe destacar el papel de Aldo Monti como príncipe de los no-muertos, no como la lamentable aparición de Fernando Osés, como el barón Brákola. Además, existe una doble versión de la película con escenas de desnudos titulada el Vampiro y el Sexo, práctica muy habitual en el cine mejicano de la época.



Por último cabe mencionar las películas Santo y Blue Demon contra Drácula y el Hombre Lobo (1972) y Chanoc vs Los Vampiros Asesinos (1981), en esta última película Santo sólo aparece en la secuencia inicial, en la que da la alternativa a su hijo, y se produce lo que podríamos llamar un traspaso de poderes. No tuvo mucha suerte el hijo del Santo en su debut al ser emparejado con Chanoc, un súper héroe en decadencia en la que se convertiría en su última película. Chanoc era un aventurero selvático, una especie de Tarzán más civilizado, que luchaba por el honor y la justicia.